ELIGIENDO TUS EMOCIONES

 Queridos amigos:

 Elijan Amor y Alegría en cada momento de sus vidas.

Si no son absolutamente claros en sus elecciones, y en la formulación de claridad en cada una de sus acciones, en cada emoción, en cada pensamiento, en cada momento, entonces no están libres de obstrucciones.

Hoy voy a comentarles sobre la claridad, el valor y el centro de la alegría, particularmente en la formulación del intento y acción.  Cuando les hablo de la claridad de intento, no me refiero  simplemente a la necesidad de una creación simple, sino a la importancia de claridad en la formulación del intento de su vida.

La emoción es una elección.  La alegría sobrepasa la emoción y es en este punto que los invito a pensar.

Cuando están experimentando algo, no importando si es placentero o desagradable porque esto es un juicio, ustedes tienen la oportunidad de cómo reaccionar.  Tienen la oportunidad de qué elegir en el rango de la emoción: Alegría, felicidad, neutralidad, dolor, sufrimiento, enojo, o miedo.

 ¿Qué más podrían elegir sino Alegría?

 La felicidad es fugaz, es momentánea.  La alegría es la celebración pura de saber quienes son.  Porque ustedes como yo, son la Fuente, Uno y Todo.

   ¿Podrían elegir experimentar algo más?

 Cuando no están en claridad, hay confusión e incertidumbre,y permiten a las emociones elegir por ustedes, en lugar de ser ustedes dirigiendo su vida.

Sean claros en lo que eligen.  No quiero decir solamente en las cosas simples, sino en la creación de cada momento de esta aventura llamada vida. 

Se necesita valor para poner hoy en día, las intenciones en acción y hasta en el momento de gran frustración decir: “No, yo no elijo esto”  Yo no elijo enojo. No elijo miedo.  No elijo una mentalidad pequeña.  Vengo a este planeta para transformarlo con amor. 

 Una vez que tengan esta claridad e intento de estar en alineación, todas las acciones necesitan ser de Amor, de Alegría, de éxtasis, de la sensación de no ser capaces de borrar la sonrisa de su cara.  Si, hasta  cuando perciban que el cielo está desplomándose.  No significa que sean ignorantes, crédulos o tontos.  Lo que significa es que son tan claros en sus acciones e intento, que sólo puede haber un desenlace.

 Persistencia, consistencia, y claridad.

Dense tiempo en las milésimas de segundos entre los pensamientos y las emociones, para decir: “Yo elijo.”  Y cuando no sepan que hacer, volteen hacia un costado, respiren hondo y piensen que siempre pueden elegir cómo actuar, sentir y pensar, sólo depende de la interpretación que hagan de las cosas que les suceden.